Creando comunidades para impulsar la recaudación de fondos a nivel local

La lucha por una sociedad equitativa y sin castas en Nepal persiste y el progreso es lento; sin embargo, las mujeres y los sectores tradicionalmente marginados han comenzado a alzar la voz y a entrar en acción. En Tewa, creemos que las mujeres pueden convertirse en integrantes efectivas y empoderadas de sus comunidades y que una manera de lograrlo es reconociendo su propia capacidad de alcanzar la independencia económica y de tener control sobre sus recursos. Queremos empoderar a las mujeres para que puedan desafiar y cambiar las estructuras de poder que las oprimen, discriminan y marginan. Con esta como nuestra creencia principal, tenemos la firme convicción de que la recaudación de fondos debe tratarse de mucho más que dinero.

Tewa significa “apoyo” en nepalí y es el único fondo de mujeres en Nepal. Promovemos la filantropía para el empoderamiento de las mujeres, la justicia equitativa y la paz mediante el financiamiento de agrupaciones registradas de mujeres, a partir de fondos locales, y el desarrollo de una cultura de filantropía. Por ejemplo, después del terremoto en Nepal en abril de 2015, las mujeres asumieron roles de liderazgo en sus comunidades para ayudar a reconstruir sus vecindarios. Una de nuestras socias beneficiarias, Pan Maya, movilizó a un grupo de mujeres en Saithok, a una distancia de tres horas a pie de Chautara, que es la sede del distrito de Sindhupalchowk, el cual fue fuertemente afectado por el terremoto. Ellas ayudaron a los aldeanos a organizar los escombros y a desmantelar los restos de los hogares de sus compatriotas. La mayoría de los hombres de la comunidad habían emigrado para trabajar en los países del Golfo, así que estas mujeres pudieron ir más allá de los límites del patriarcado tradicional y, con apoyo financiero, asumieron muchas de las funciones que habrían desempeñado los hombres. Los desastres naturales hacen tambalear los cimientos de las comunidades, incluso los roles de género tradicionales se transforman.

World Bank Photo Collection/Flickr/(Some Rights Reserved)

The battle for a caste free and equitable society in Nepalis ongoing and progress is slow, but women and the traditionally marginalized have started speaking up and taking action.


El financiamiento local ha sido fundamental para nuestra capacidad de ayudar a mujeres como Pan Maya. De hecho, los donantes locales aportan el 55 % de nuestro presupuesto de concesión de subvenciones y los financiadores extranjeros proporcionan el 45 %. Con creatividad y persistencia, hemos logrado recaudar un promedio de $25,000 al año a partir de fuentes locales para otorgar financiamiento a agrupaciones femeninas de base. Involucramos a donantes individuales diversos (en términos de clase, casta, etnia, geografía, edad, religión y grupos de ingresos) y recaudamos dinero de todas las categorías de donantes: individuos, corporaciones, la diáspora y pequeñas empresas, mediante colectas de puerta en puerta, eventos, campañas y técnicas innovadoras basadas en el contexto. También utilizamos diferentes estrategias para acercarnos a diferentes personas: proyecciones cinematográficas, caminatas, Deep Prajwalan (encender velas en recuerdo de los seres queridos) y rifas, así como los tés de Tewa. Los tés de Tewa son redes de relaciones de confianza respaldadas por personas que se preocupan profundamente por el mundo en su conjunto. Esta forma de recaudación de fondos consiste en reuniones de té organizadas por “Ángeles” (amigas) de Tewa en los Estados Unidos en las cuales se venden chales y otros artículos hechos a mano. A grandes rasgos, el dinero que recaudamos proviene en un 7 % de nuestros eventos, 13 % de los tés de Tewa, 33 % de las donaciones y 47 % de las campañas.

Una estrategia de recaudación de fondos particularmente importante que hemos utilizado es fomentar la participación de voluntarias y desarrollar la capacidad de la comunidad. Capacitamos, movilizamos y educamos en materia de feminismo y filantropía a las voluntarias que nos ayudan con la recaudación de fondos, para llegar a comunidades diversas y lograr su compromiso. No se trata solo de recaudar fondos, sino de capacitar a las feministas y activistas sociales. Una vez capacitadas, las voluntarias van y difunden el trabajo en sus propias redes y desarrollan planes individuales de recaudación de fondos. Actualmente, contamos con más de 683 voluntarias, de las cuales entre 250 y 300 participan activamente en la recaudación de fondos. Involucramos a estas voluntarias en nuestros talleres y las capacitamos en habilidades que pueden utilizar en otros aspectos de sus vidas. El resultado es que estas voluntarias desarrollan un interés genuino en el trabajo que hacemos y muchas de ellas se involucran personalmente en nuestras actividades, al convertirse en donantes. Además, muchas voluntarias han iniciado sus propios negocios y se han convertido en mentoras en sus comunidades.

Nuestro programa de voluntariado ha ocasionado una gran cantidad de efectos en cadena

Nuestro programa de voluntariado ha ocasionado una gran cantidad de efectos en cadena: muchas de las participantes afirman que trabajar con Tewa cambió su forma de pensar y la manera en que interactúan con sus familias y comunidades. No publicamos anuncios solicitando voluntarias. Quienes participan en nuestras capacitaciones se enteran de ellas a través de personas que trabajan o trabajaron como voluntarias. Este es un desafío pero también demuestra el inmenso impacto del programa. Después de todo, la recaudación de fondos nunca debe tratarse exclusivamente de los dólares recaudados; también debe tratarse de crear conciencia sobre los derechos de las mujeres y la justicia social. Muchas de nuestras voluntarias no habían escuchado sobre los derechos, la justicia social o la filantropía antes de entrar en contacto con Tewa. Ahora, las voluntarias organizaron su propio boletín, crearon un fondo de dotación que les permite realizar visitas con las beneficiarias, y han distribuido ahorros y créditos como una iniciativa para ayudar a otras mujeres. Además, muchas voluntarias decidieron recientemente donar dinero para la construcción del centro de Tewa, una instalación integral y de usos múltiples que ayuda a generar ingresos al arrendarla. Conseguimos reunir alrededor de una décima parte de los fondos para construir este centro a partir de fuentes locales.

Más allá del trabajo de las voluntarias, hemos contactado a bancos y corporaciones, pero es más difícil obtener fondos de estas instituciones, ya que la mayoría de ellas cuentan con sus propias organizaciones de beneficencia. Si bien hemos tenido cierto éxito al conseguir patrocinios para nuestros eventos por parte de bancos y corporaciones, relacionarnos y colaborar con donantes individuales y pequeñas empresas parece ofrecer mejores perspectivas para generar un apoyo sostenible o de largo plazo, ya que hay más posibilidades de una coincidencia de valores y objetivos. Por ejemplo, al acercarnos a una empresa pequeña de cosméticos y explicarle nuestro trabajo, logramos forjar una alianza conforme a la cual la empresa dona un pequeño porcentaje de sus ganancias a Tewa.

No obstante lo anterior, recaudar fondos a nivel local definitivamente no es fácil, y la fatiga de los donantes es un problema fundamental. Durante 19 años solo aceptamos donaciones locales para otorgar subvenciones (los fondos de donantes externos servían como apoyo básico para el salario del personal y la administración organizacional); sin embargo, conforme ampliamos nuestro alcance, la demanda de subvenciones superó por mucho nuestra oferta. Las transiciones posteriores a los conflictos, el reciente terremoto y la inestable situación política interna han empeorado aún más las condiciones socioeconómicas y han hecho que la recaudación de fondos local sea un desafío. Como tal, a partir de 2014, también hemos aceptado fondos equivalentes de donantes extranjeros para poder ampliar nuestra concesión de subvenciones, ya que la demanda y las necesidades son inmensas. Si dependiéramos exclusivamente de la recaudación de fondos a nivel local, no habríamos sido capaces de dar subvenciones más grandes a más socias beneficiarias. Sin embargo, recibir apoyo extranjero no ha disminuido nuestros esfuerzos y campañas de recaudación de fondos. Seguimos aumentando nuestra recaudación de fondos a nivel local mediante campañas anuales de donación y alianzas con empresas.

Gracias a la filantropía local, podemos seguir apoyando a mujeres como Pan Maya, que es una inspiración para todos nosotros. Esta filantropía a nivel de base es lo que defendemos en Tewa, y no lo hacemos para obtener beneficios religiosos en otra vida, sino por su capacidad de lograr cambios reales y tangibles en el presente. Debido a la forma en que capacitamos a nuestras voluntarias, hemos construido una generación cada vez más grande de defensoras y de mujeres empoderadas que asumen papeles de liderazgo en sus comunidades. La filantropía se trata de crear confianza, generar activos y habilitar capacidades, así que es una bendición doble: bendice a quien da y a quien recibe.